“Una madre es una persona que viendo que hay solamente cuatro tajadas de pastel para cinco personas, rápidamente dice que nunca le ha gustado esa clase de pastel” Tenneva Jordan
“Todo lo que soy o espero ser, se lo debo al ángel de mi Madre” – Abraham Lincoln
“La frase ‘madre trabajadora´ es redundante” – Jane Sellman
Leyendo frases como las anteriores muy posiblemente recuerdes el rol fundamental que tu mamá ha jugado en tu vida y cómo, consciente o inconscientemente para ti, tú eres lo que eres gracias a la influencia que recibiste de ella.
Una buena madre entrega todo de sí por sus hijos -su parte del pastel, por usar la analogía de la primera frase- y asume ese “cargo” desde el momento en que ellos nacen (trabajo que, por cierto, continúa hasta el fin de sus días). En muchas ocasiones esta labor no es apreciada, recompensada o valorada lo suficiente y las madres se colocan en el último lugar de la lista.
Los ángeles, seres de luz creados por Dios para ayudarnos a los seres humanos en nuestro proceso de crecimiento aquí en la tierra, llegan con un mensaje que busca que tú, si eres madre, recuerdes la importancia de cuidarte a ti misma para que de esa manera puedas continuar desarrollando tu labor de la mejor forma posible. A continuación Ana Mercedes sus consejos:
1. Practica el ejercicio del autoamor. Este ejercicio, dicen los ángeles, busca que fortalezcas el amor propio y la autoestima en ti, ya que en la medida en que te ames más asimisma podrás amar más a los demás. Una forma práctica de llevarlo a cabo es dedicando unos minutos cada día o mínimo cada tercer día a pararte en frente del espejo y mirándote fijamente a los ojos te digas: “____(tu nombre), te amo como eres pues eres un ser de Dios y por lo tanto eres perfecta”.
2. En el aspecto emocional y de pareja, los ángeles sugieren orar con la pareja: “simplemente digan una corta oración juntos, tomados de la mano. Den gracias al Padre por su relación y pídanle que los bañe con la luz rosa del amor. Hagan esto todos los días si es posible y les aseguramos que sentirán un cambio positivo en el ambiente de su hogar”. El arcángel Chamuel es el arcángel del amor y las relaciones, así que puedes pedirle que los acompañen a ti y a tu pareja constantemente para sentir su energía en sus corazones.
3. Si en estos momentos de tu vida no tienes una pareja, la recomendación angelical es que trabajes el amor propio como se indicó en el punto 1 y además visualizar aquello que deseas tener en tu vida emocional. Imagínate feliz y siente (esto es lo más importante) esa felicidad dentro de ti. Si lo practicas con constancia, lo materializarás y lo podrás ver en tu vida. Si lo deseas, durante esta práctica puedes pedir la asistencia del arcángel Jeremiel, quien es un ser de luz que ayuda con la manifestación de nuestros deseos.
4. Para el aspecto profesional, los ángeles te recomiendan el siguiente ejercicio: define una meta principal y luego de tenerla clara, dedica unos momentos para hacer una meditación: escribe tu deseo en un papel (aunque puede ser de cualquier color te sugerimos que sea amarillo) y enciende una vela de color amarillo. Léelo en voz alta, pidiendo a Dios siempre que sea Su voluntad la que se manifieste y que si tu deseo forma parte del Plan que El tiene para ti, te sea concedido. En lo posible, trata de hacer esta práctica por 7 días seguidos y luego guarda el papel en un lugar cercano a ti (en tu mesa de noche, por ejemplo). Dale tiempo al tiempo para ver las cosas darse de la manera que más te convienen.
5. En cuanto a la parte familiar, los seres de luz indican que en este caso, como en el caso de la relación de pareja, la oración en conjunto es fundamental para “inundar” el hogar de energía positiva y de amor. Trata de establecer esa práctica. Ahora bien, por tu parte te recomiendan leer diariamente el Salmo 91 de la Biblia el cual es el salmo de protección de los ángeles para que tú y tus seres amados estén rodeados de dicha protección, tener flores blancas y colocar una vela blanca de agradecimiento a Dios por lo que les entrega cada día.
6. Pídele a Dios que te dé sabiduría, paz interior y fortaleza para asumir tus funciones de madre de la mejor manera posible. Hazte el propósito de mantener una sonrisa en tu rostro y siempre, siempre, mantén en tu mente una imagen que represente la felicidad en tu hogar. Esto tiene un poder inmenso, indican los ángeles, pues todo se crea de esa manera: a nivel energético primero y luego se materializa en el mundo físico.
FUENTE: http://www.revistafucsia.com/
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