Si te son familiares algunas de las siguientes frases,
preocúpate, pues algunas somos nuestras peores enemigas:
“Estoy muy gorda”
“esta ropa no me queda bien”
“No, con ese color ni hablar… ¡me veo fatal!”
“No tengo tiempo para nada…”
“¿Tener un momento para mí misma?
Ni hablar, ¡estoy llena de trabajo!”
“¡Qué tonta que soy!”
“Si fuera más bonita…”
“Tengo miedo a salir de mi zona cómoda”
“Sin él… cómo sobreviviré?”
“No sirvo para esas cosas”
“No, no estoy preparada”
“Soy fea…”
Ahora piensa en una buena amiga tuya, ¿le dirías todo lo que te acabas de decir a ti misma? No, ¿verdad? Cómo ser tu propia mejor amiga:
Admírate. ¡Sí! Admírate, porque quizás pasaste por muchas situaciones difíciles, y aun hoy sigues soñando, entera, esperando y buscando por supuesto, que nuestros sueños se hagan realidad.
Concédete permiso para lograr tu sueño. Mientras estamos en este maravilloso mundo, todas sin excepción, tenemos metas y sueños por realizar. Aunque te suene cursi, búscate una estrella ¡y síguela! Quizás no llegues hasta ella… pero lo más hermoso es el camino hacia ella.
Se optimista. Haz del optimismo, del buen ánimo, de la alegría, del entusiasmo, tus fieles y leales compañeros.
No renuncies. La habilidad está en nuestro interior. Tenemos muchas e infinitas capacidades, cualidades y virtudes… es una fuente inagotable de la cual tú puedes beber si te lo propones.
Analiza qué tipo de mujer eres… y decide qué tipo de mujer quieres llegar a ser.
Trabaja.(miren quien lo dice xD) A veces no le damos mucha importancia a nuestro trabajo (y a veces le damos demasiada, lo importante está en el equilibrio).
El trabajo te proporciona independencia financiera (dejar de trabajar porque tu pareja así lo quiere, y prefiere que estés en casita… quizá te resulte cómoda.
Sé animosa, ten fe… Piensa que solo una vez pasamos por este camino. Si algo malo está sucediendo hoy en tu vida, aunque no lo creas, tú la elegiste. La autocompasión no es buena, cansarás a la gente a que te rodea, y terminarás emocionalmente agotada.
Piénsalo con mucha, mucha calma. Quizás esto te suene raro, pero si aún eres soltera o sin hijos, eres tú quien decide quién será el padre de tus hijos. Todas las decisiones serias que tengas que tomar, tómalas con calma.
Aprende a decir no. Aprende a expresar tus sentimientos y necesidades. Haz tus propias elecciones. No permitas que nadie te presione.
Decir “lo siento, pero no puedo” es una frase que debes usar cada vez que sea necesario.
Se amable con los demás. Ser amigable, considerada, complaciente, servicial, ¡es muy, muy bueno! Al menos, si sale de tu corazón actuar así. Si lo haces por complacer a otros, puedes terminar insatisfecha, malhumorada… y hasta enferma.
Sueña. NUNCA, NUNCA, JAMÁS renuncies a un sueño, o a una meta. Para eso necesitas ser: ¡¡¡Tu mejor amiga!!! Cada minuto es una oportunidad para cambiar nuestra vida. No te limites, convierte tus sueños en realidad.
Motívate a seguir adelante. Dejemos que la vida nos dé a manos llenas lo que tanto anhelamos. Definitivamente, una vida sin sueños, a mi modo de ver… no es vida.
Piensa en tu vida ¿Vives tu vida o estás viviendo la vida de otros? Te invito a pensarlo.
¡Ponte bonita! No hay mujer fea. Una buena imagen puede darnos alegría. No necesitas gastar mucho, sólo una dosis de buen gusto, un cabello saludable, una sonrisa hermosa, ¡y listo! ¿Te animas?
Y nunca olvides hacerte siempre esta pregunta:
¿QUÉ ME HACE FELIZ?
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