Y en el peor de mis errores, en la más dulce alegría te encontré…
Y no me importa que me mientas quizás el problema sea ese… que no me importa que tan malo sea eso.
Arjona, por favor, ayúdame. No sé si Freud te ayudó, no sé si al final cometiste el error más grande del mundo, como yo lo estoy haciendo… Sí, quiero cometerlo y no tiene nada que ver con Miami ni la Habana… y no sé si quiero, porque creo que ya lo hice…
Quiero olvidarme de ti, pero el problema es que te siento hasta en las notas del piano… Mente tonta que no te deja ir. Ayúdame un poco. Reacciona. Pensé que la mente siempre tenía la razón, pero ella hace que mis pensamientos vivan en el recuerdo.
Sin embargo, en el peor de mis recuerdos, en el más dulce de ellos, te encuentro... y eso lamentablemente me hace feliz.
Y no me importa que me mientas quizás el problema sea ese… que no me importa que tan malo sea eso.
Arjona, por favor, ayúdame. No sé si Freud te ayudó, no sé si al final cometiste el error más grande del mundo, como yo lo estoy haciendo… Sí, quiero cometerlo y no tiene nada que ver con Miami ni la Habana… y no sé si quiero, porque creo que ya lo hice…
Quiero olvidarme de ti, pero el problema es que te siento hasta en las notas del piano… Mente tonta que no te deja ir. Ayúdame un poco. Reacciona. Pensé que la mente siempre tenía la razón, pero ella hace que mis pensamientos vivan en el recuerdo.
Sin embargo, en el peor de mis recuerdos, en el más dulce de ellos, te encuentro... y eso lamentablemente me hace feliz.
fuente: http://escriboalaire.blogspot.com/