De niña a mujer
¿Cómo hace una adolescente para crecer ante los reflectores, hacer una transición exitosa de niña a adulta estrella y no sucumbir ante los embates de la edad, la prensa y un creciente poder que volvería loco a más de uno? COSAS se lo preguntó con ocasión de su próximo concierto en Lima, el 1 de mayo en la explanada del Estadio Monumental. La respuesta: tomarlo todo con pasmosa naturalidad y una inesperada mezcla de ingenuidad y madurez.
Cómo duele crecer. Esos cambios de carácter. Esa extraña ansiedad. Esas crisis tan personales, tan íntimas, tan secretas. Cómo hacer para afrontarlas si todos te están mirando. Qué hacer con la propia imagen. En el 2008 Miley Cyrus ganó 25 millones de dólares, siete más que el año previo. Ocupaba el puesto 35 de la lista del “Celebrity 100” de la revista “Forbes”, experta en la materia –en crisis de crecimiento y en millones– y la revista “Parade” reportaba que era la celebridad adolescente más adinerada, cuya franquicia, Hannah Montana, valdría con algunos miles de diferencia, mil millones de dólares a fines de ese mismo año. La foto de su primer beso se cotizaba entre los 30 mil y los 150 mil, y la revista “Time” la incluyó en la lista de las cien personas más influyentes del mundo. La reseña que publicaron entonces fue escrita por el ex niño estrella Donny Osmond, quien advertía, con pleno conocimiento de causa, “está montando una gigantesca marejada en el pináculo de su carrera. Espero que lo esté disfrutando. Dentro de tres o cinco años Miley tendrá que encarar la adultez y cuando lo haga querrá cambiar su imagen y en ese cambio, se encontrará con la adversidad”, pronosticaba entonces. Ese momento ha llegado. Ahora, de gira por Sudamérica, se presenta como una niña grande de piernas largas y falda corta, cuya ínima variación de un par de centímetros genera alegría en los jóvenes y urticaria en conservadoras madres que la recomendaron a sus hijos cuando era una niña Disney, cuando estaba lejos la controversia de unas fotografías en “Vanity Fair” que la mostraban sexi, en la que no quedaba claro si bajo esa sábana había o no un topless. “Fui parte de una sesión de fotos que debía ser artística, pero ahora que veo las imágenes y leo la nota que las acompaña me siento un poco avergonzada”, intentó excusarse. Un año más tarde, en los Teen Choice Awards, mortificó mucho que practicara algo de pole dance, por lo que fue severamente criticada. Y hace cuatro meses, fue motivo de primeras planas, otra vez; en esta ocasión por fumar algo sospechoso en un bong durante su cumpleaños número 18. Dicen que se disculpó alegando que era salvia, una planta psicoactiva que en Estados Unidos es legal. Ese mismo mes, por esas cosas de la vida, escaló a la posición número trece de la lista de Forbes” de gente poderosa. Hace poco tuvo la idea genial de reabrir su cuenta de Twitter con la finalidad de seguir al actor Charlie Sheen, a quien le envió un mensaje: “Tú me has enseñado todo lo que sé sobre el éxito”. El actor le dio la bienvenida a la red social con un mensaje que decía: “Querida Miley, bienvenida de nuevo a Twitter. Gracias por el amor”.
-Normalmente los amigos vienen del colegio o de la universidad. ¿De dónde vienen tus amigos?
-Mi padre siempre ha sido cantante, así que crecí de gira. Cuando empecé con Hannah Montana estaba en sexto rado y vivía en Nashville; así que de alguna manera siempre estuve acostumbrada. Así que cuando quise ingresar a la industria del entretenimiento…”
-Claro. Pero ¿de dónde vienen tus amigos?
-Bueno al estar en Nashville, que es la capital de la música country, muchos de mis amigos son cantantes o están en este tipo de negocio, tocan instrumentos… por el hecho de ser músicos se trata de gente honesta. Es por eso que me gusta que mis amigos estén relacionados a la música.
-¿Cómo es crecer en público, en frente de una cámara?
-Creo que ese es el mayor bajón de estar en esta industria; tener tu vida personal de manera tan pública. Es una suerte de falta de respeto, arruina la magia de creer que todos son el personaje que interpretan. En el plano personal, no me gusta.
Si hubiera una cosa que cambiaría sería eso, cómo se ha vuelto todo tan irrespetuoso y malcriado. Es por eso que me gusta ser muy honesta en mi música y es lo que quiero mostrar a mis fans. La vida personal no es asunto de nadie, más aún cuando involucra tu familia.
-¿Sientes que te has perdido de algo en tu carrera?
-No. Viajo mucho y hago todo lo que quiero.
-Estás atravesando una inmensa transición. Solías ser una niña estrella y ahora buscas ser una estrella adulta. Ese camino no ha resultado positivo para montones de niños estrellas. ¿Cuál es tu estrategia para lograrlo xitosamente?
-No sé si tengo una. Pienso que lo mejor es ser honesta mientras la gente te apoye y te quiera y mientras no tengas que decir “tengo que hacer estas cosas para convertirme en adulta, o verme sexi”. Creo que es algo que simplemente me está pasando.
-¿No tienes miedo?
-No tienes porque tener miedo si tienes buenos admiradores.
-Pero tu nueva imagen es mucho más sexi.
-Lo que quiero hacer es exactamente lo mismo que he estado haciendo los últimos seis años, que es lo que amo.
-Has escuchado las historias que se cuentan de Britney Spears. ¡Y hay gente que espera que te conviertas en ella!
-Cuando eres parte de la industria, todo el mundo está siempre a la expectativa de que te embarres. Estoy segura de que hay periodistas con los que tú trabajas que no quieren que te vaya bien porque están celosos o porque quieren hacer lo que tú haces. ¡Es así en todas las industrias! Es horrible y es por eso que te tienes que desdoblar: cuando trabajas es trabajo, y cuando es tu vida privada, vas por completo al lugar que te pertenece y solo dejas pasar a gente con el corazón puro.
-¿Qué piensas de Britney?
-La adoro. Creo que es excelente. Siempre ha sido una amiga leal. Entiendo por qué ha tenido estos pequeños malos ratos, pero pienso que al final ella es talento puro. Ella define la industria del pop.
-¿Quiénes son tus modelos en la industria? ¿A quién te gustaría parecerte en la industria?
-Mi madrina es Dolly Parton. Alguien que es muy respetuosa. La quiero muchos.
-¿Dolly Parton? ¿No Madonna? ¿No Lady Gaga?
-Hay otras grandes, pero no son gente a la que yo presto atención. ¿Cómo puedo admirar a alguien a quien no conozco personalmente? Ellas son increíbles en el escenario, pero no conozco sus corazones… no sé quiénes son.
-¿Qué pueden esperar tus fanáticos de tu presentación?
-Es un show mucho más libre. Yo lo que intento es divertirme y espero que quienes vayan canten conmigo. Eso es lo que más me gusta de escribir una canción.
FUENTE: Revista Cosas, Perú
¿Cómo hace una adolescente para crecer ante los reflectores, hacer una transición exitosa de niña a adulta estrella y no sucumbir ante los embates de la edad, la prensa y un creciente poder que volvería loco a más de uno? COSAS se lo preguntó con ocasión de su próximo concierto en Lima, el 1 de mayo en la explanada del Estadio Monumental. La respuesta: tomarlo todo con pasmosa naturalidad y una inesperada mezcla de ingenuidad y madurez.
Cómo duele crecer. Esos cambios de carácter. Esa extraña ansiedad. Esas crisis tan personales, tan íntimas, tan secretas. Cómo hacer para afrontarlas si todos te están mirando. Qué hacer con la propia imagen. En el 2008 Miley Cyrus ganó 25 millones de dólares, siete más que el año previo. Ocupaba el puesto 35 de la lista del “Celebrity 100” de la revista “Forbes”, experta en la materia –en crisis de crecimiento y en millones– y la revista “Parade” reportaba que era la celebridad adolescente más adinerada, cuya franquicia, Hannah Montana, valdría con algunos miles de diferencia, mil millones de dólares a fines de ese mismo año. La foto de su primer beso se cotizaba entre los 30 mil y los 150 mil, y la revista “Time” la incluyó en la lista de las cien personas más influyentes del mundo. La reseña que publicaron entonces fue escrita por el ex niño estrella Donny Osmond, quien advertía, con pleno conocimiento de causa, “está montando una gigantesca marejada en el pináculo de su carrera. Espero que lo esté disfrutando. Dentro de tres o cinco años Miley tendrá que encarar la adultez y cuando lo haga querrá cambiar su imagen y en ese cambio, se encontrará con la adversidad”, pronosticaba entonces. Ese momento ha llegado. Ahora, de gira por Sudamérica, se presenta como una niña grande de piernas largas y falda corta, cuya ínima variación de un par de centímetros genera alegría en los jóvenes y urticaria en conservadoras madres que la recomendaron a sus hijos cuando era una niña Disney, cuando estaba lejos la controversia de unas fotografías en “Vanity Fair” que la mostraban sexi, en la que no quedaba claro si bajo esa sábana había o no un topless. “Fui parte de una sesión de fotos que debía ser artística, pero ahora que veo las imágenes y leo la nota que las acompaña me siento un poco avergonzada”, intentó excusarse. Un año más tarde, en los Teen Choice Awards, mortificó mucho que practicara algo de pole dance, por lo que fue severamente criticada. Y hace cuatro meses, fue motivo de primeras planas, otra vez; en esta ocasión por fumar algo sospechoso en un bong durante su cumpleaños número 18. Dicen que se disculpó alegando que era salvia, una planta psicoactiva que en Estados Unidos es legal. Ese mismo mes, por esas cosas de la vida, escaló a la posición número trece de la lista de Forbes” de gente poderosa. Hace poco tuvo la idea genial de reabrir su cuenta de Twitter con la finalidad de seguir al actor Charlie Sheen, a quien le envió un mensaje: “Tú me has enseñado todo lo que sé sobre el éxito”. El actor le dio la bienvenida a la red social con un mensaje que decía: “Querida Miley, bienvenida de nuevo a Twitter. Gracias por el amor”.
-Normalmente los amigos vienen del colegio o de la universidad. ¿De dónde vienen tus amigos?
-Mi padre siempre ha sido cantante, así que crecí de gira. Cuando empecé con Hannah Montana estaba en sexto rado y vivía en Nashville; así que de alguna manera siempre estuve acostumbrada. Así que cuando quise ingresar a la industria del entretenimiento…”
-Claro. Pero ¿de dónde vienen tus amigos?
-Bueno al estar en Nashville, que es la capital de la música country, muchos de mis amigos son cantantes o están en este tipo de negocio, tocan instrumentos… por el hecho de ser músicos se trata de gente honesta. Es por eso que me gusta que mis amigos estén relacionados a la música.
-¿Cómo es crecer en público, en frente de una cámara?
-Creo que ese es el mayor bajón de estar en esta industria; tener tu vida personal de manera tan pública. Es una suerte de falta de respeto, arruina la magia de creer que todos son el personaje que interpretan. En el plano personal, no me gusta.
Si hubiera una cosa que cambiaría sería eso, cómo se ha vuelto todo tan irrespetuoso y malcriado. Es por eso que me gusta ser muy honesta en mi música y es lo que quiero mostrar a mis fans. La vida personal no es asunto de nadie, más aún cuando involucra tu familia.
-¿Sientes que te has perdido de algo en tu carrera?
-No. Viajo mucho y hago todo lo que quiero.
-Estás atravesando una inmensa transición. Solías ser una niña estrella y ahora buscas ser una estrella adulta. Ese camino no ha resultado positivo para montones de niños estrellas. ¿Cuál es tu estrategia para lograrlo xitosamente?
-No sé si tengo una. Pienso que lo mejor es ser honesta mientras la gente te apoye y te quiera y mientras no tengas que decir “tengo que hacer estas cosas para convertirme en adulta, o verme sexi”. Creo que es algo que simplemente me está pasando.
-¿No tienes miedo?
-No tienes porque tener miedo si tienes buenos admiradores.
-Pero tu nueva imagen es mucho más sexi.
-Lo que quiero hacer es exactamente lo mismo que he estado haciendo los últimos seis años, que es lo que amo.
-Has escuchado las historias que se cuentan de Britney Spears. ¡Y hay gente que espera que te conviertas en ella!
-Cuando eres parte de la industria, todo el mundo está siempre a la expectativa de que te embarres. Estoy segura de que hay periodistas con los que tú trabajas que no quieren que te vaya bien porque están celosos o porque quieren hacer lo que tú haces. ¡Es así en todas las industrias! Es horrible y es por eso que te tienes que desdoblar: cuando trabajas es trabajo, y cuando es tu vida privada, vas por completo al lugar que te pertenece y solo dejas pasar a gente con el corazón puro.
-¿Qué piensas de Britney?
-La adoro. Creo que es excelente. Siempre ha sido una amiga leal. Entiendo por qué ha tenido estos pequeños malos ratos, pero pienso que al final ella es talento puro. Ella define la industria del pop.
-¿Quiénes son tus modelos en la industria? ¿A quién te gustaría parecerte en la industria?
-Mi madrina es Dolly Parton. Alguien que es muy respetuosa. La quiero muchos.
-¿Dolly Parton? ¿No Madonna? ¿No Lady Gaga?
-Hay otras grandes, pero no son gente a la que yo presto atención. ¿Cómo puedo admirar a alguien a quien no conozco personalmente? Ellas son increíbles en el escenario, pero no conozco sus corazones… no sé quiénes son.
-¿Qué pueden esperar tus fanáticos de tu presentación?
-Es un show mucho más libre. Yo lo que intento es divertirme y espero que quienes vayan canten conmigo. Eso es lo que más me gusta de escribir una canción.
FUENTE: Revista Cosas, Perú
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